La Virgen María es honrada en el mes de Mayo, esto se remonta al Siglo XVII. Si bien, no siempre se llevó a cabo en mayo, el mes de María incluía treinta ejercicios espirituales diarios en honor a la Madre de Dios.
Fue en esta época que el mes de mayo y de María se combinaron, haciendo que esta celebración cuente con devociones especiales organizadas cada día durante todo el mes. Esta costumbre se extendió sobre todo durante el siglo XIX y se practica hasta hoy.
Es costumbre que las parroquias tenga un rezo diario del Rosario y que en muchos altares se erija una estatua o imagen de la madre de Dios. Además, se suele coronar su imagen, esta tradición es conocida como la Coronación de Mayo.
A menudo, la corona está hecha de hermosas flores que representan la belleza y la virtud de María y también es un recordatorio a los fieles para esforzarse en imitar sus virtudes.
En los hogares, los fieles también pueden participar de esta celebración, dándole a María un lugar especial y adornarlo con flores, no solo porque sea una tradición de larga data, sino porque ella es nuestra Madre, que se preocupa por nosotros, intercediendo incluso en los asuntos más pequeños.
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